¿Quién Soy?

¡Hola leales lectores! Qué honor tenerte aquí conmigo para que podamos pasar tiempo juntos. Valoro el tiempo que has elegido de tu apretada agenda para leer palabras de aliento para ti. No lo doy por sentado y desde el fondo de mi corazón digo ¡gracias!

Hoy estaba reflexionando sobre la pregunta ¿quién soy? Creo que esa es una pregunta que muchos se han planteado en algún momento de sus vidas. ¿Y tú? ¿Te has hecho la misma pregunta? Si es así, averigüemos qué respuestas se descubrirán que pueden sorprenderte gratamente.

No hace mucho tiempo, tomé un pedazo de papel y comencé a escribir las cosas que amo y me apasionan. También escribí sobre las cosas que no quiero, no me gustan o no toleraré en mi vida. Seré honesta contigo; Me llevó tiempo escribirlo. Sin embargo, me ha dado la oportunidad de saber quién soy realmente.

Esto me dio claridad de quién era realmente. ¿Por qué es importante tenerlo claro? Cuando tienes claridad de tu identidad, habrá congruencia en todos los aspectos de tu vida. No eres ambiguo en cuanto a tus valores fundamentales contigo mismo ni cuando te relacionas con los demás.

Tu autenticidad se verá reflejada en todo lo que te rodea. Incluso si ha hecho esto anteriormente, tómese un momento para determinar si hay algún cambio que deba agregarse o eliminarse. Mira lo que anotaste, ¿te describe bien? ¡Excelente! Sabes quién eres. ¡Que se refleje todos los días!

 Para los que dijeron: "Todavía no". No te preocupes, ten en cuenta que este es un proceso de descubrimiento desde adentro hacia afuera. Valora el tiempo dedicado a conocerte a ti mismo en profundidad. ¡Disfruta cada momento!

"Te daré gracias y te alabaré, porque he sido hecho de manera formidable y maravillosa; Maravillosas son tus obras; y que mi alma lo sabe muy bien. 

Salmos 139:14

¡Paz, Amor y Gozo!

Sandra Ivette Miranda

Esperando Pacientemente

¡Hola, leales lectores! Me alegro mucho de que estés conmigo hoy para que podamos hablar de un tema que a muchos no les gusta escuchar. Esperemos que no estés en esa categoría a la que me refiero. Incluso si es así, es posible que lo vea de manera diferente al final de esta publicación de blog. ¡Realmente creo que puede ser para ti!

La palabra que voy a compartir es la palabra paciencia. ¡No! Tal vez esto NO es lo que querías leer esta semana. Sin embargo, permítanme arrojar algo de luz sobre esta palabra. Primero, veamos la definición de la misma. Se define como la capacidad de tolerar o aceptar retrasos, problemas o sufrimientos sin enojar o enfadar.

Te estarás preguntando; ¿Cómo no molestarse o enojarse cuando hay un retraso en su situación? Cuando calmas intencionalmente tus emociones, traerá paz dentro de ti. A medida que evalúas tu situación, procedes a poner en práctica lo que puedes lograr. Estás esperando activamente lo que deseas.

Deja que lo que estás deseando produzca una expectativa del resultado. Esto, a su vez, producirá una alegría de anticipación que los llevará hasta que se convierta en una realidad. Te estás moviendo en la dirección correcta con tus acciones junto con tu fuerza para perseverar incluso con el tiempo mismo.

La paciencia no es la capacidad de esperar, sino cómo te comportas mientras esperas. La paciencia atrae a dos grandes amigos que son la paz y el gozo; acerca lo que está lejos. La paz y el gozo se producen dentro de ti, y no están determinadas por situaciones externas. Es una elección deliberada que uno hace calmadamente, esperando pacientemente el momento que lo cambiará todo.

Dicho esto, te animo a que elijas de manera intencional, con gozo, pacífica y pacientemente lo que esperas. Llegará en el momento adecuado y en el momento preciso que no podrías haberlo planeado mejor. ¿Por qué? En pocas palabras, ¡Dios escucha tus oraciones!

"Esperé pacientemente al Señor; Se volvió hacia mí y escuchó mi clamor" Salmos 40:1

¡Paz, Amor y Gozo!

Sandra Ivette Miranda

Redescubriéndonos

¡Hola queridos lectores! ¿Alguna vez se han preguntado cómo sería cambiar radicalmente quiénes son? Algunos podrían desear un cambio físico, otros una situación diferente, y algunos incluso una transformación total. ¡Yo definitivamente estaba en este último grupo! Quería ser irreconocible cuando me mirara en el espejo. ¿Y ustedes?

En mi jornada de vida, me di cuenta de que la esencia de quien soy no era lo que necesitaba transformarse. Pueden preguntar, ¿a qué me refiero con eso? Me refiero a que tuve que adentrarme profundamente en mí misma para redescubrir quién realmente era. Me convertí en una detective determinada dispuesta a llegar al fondo de la verdad, y solo a la verdad.

Con diligencia y determinación, descubrí capas de mentiras que camuflaban y ocultaban mi verdadero ser de manera impactante. Arranqué enojadamente una por una las mentiras, destruyendo cualquier rastro de ellas. ¡Ya era suficiente! Mis ojos empezaron a ver claramente lo que estaba debajo de todo eso. Un sentido de asombro invadió mi corazón. ¿Por qué?

De repente, una persona nueva y maravillosa me estaba mirando con asombro. Aunque ella me reconocía, yo apenas la recordaba de mis sueños nocturnos. ¡Sí, una vez más unida para convertirme en mi verdadero yo! Comencé a amar quién soy como persona. Tengo un sentido del humor peculiar, amo a la gente, amo aprender, y soy cuidadosa y compasiva con los demás. Esas características y valores, no quería cambiarlos en absoluto.

Lo que he descubierto, quiero compartirlo con aquellos que desean vivir una vida de alegría, paz y amor en su máxima expresión. No estoy diciendo que ya haya llegado allí, pero estoy en un lugar mejor que ayer, la semana pasada y definitivamente el año pasado. ¿Por dónde comienzas esta nueva aventura? ¡Los espero con mucha alegría y con una gran sonrisa, continuaré platicando con ustedes en el próximo blog!

"Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano para que anduviéramos en ellas." Efesios 2:10

¡Paz, Amor y Alegría!

Sandra Ivette Miranda